Hoy me dirijo específicamente a esas mujeres que, como yo, sois la pata coja en una pareja infértil. El factor masculino lo dejamos para otro día.
Sobra decir que no soy totalmente feliz. Llevo ya 15 meses buscando un embarazo que no llega, y tengo, recién salido del horno, un diagnóstico horrible de fallo ovárico precoz.
Tengo mis días tristes porque no me quedo embarazada, porque aún no he cumplido el sueño de ser madre. Pero otros días veo a mi marido sufrir por lo mismo, y no puedo evitar sentirme culpable.
Lo sé. No es culpa mía. Simplemente, soy así. Y aún puedo darme con un canto en los dientes por haberme puesto a intentar quedarme embarazada hace un año, cuando tenía 27 años. Si llego a empezar la búsqueda con 31, casi seguro que tendría que recurrir a donante de óvulos.
Pero me siento culpable.
Culpable de tener ovarios de abuela, culpable de no ser capaz de darle ese hijo tan deseado a mi marido, de no poder cumplir, de forma natural, el propósito para el que supuestamente estamos diseñadas. Probablemente algunas penséis que exagero. Otras muchas os sentiréis identificadas.
Y ahí está él. Intentando consolarme como puede, diciéndome que siempre estará conmigo y que mi problema no va a hacer que me quiera menos. Pero no puedo evitar pensar que no puedo completarle.
Doy gracias a la ciencia por existir la FIV. En menos de un mes espero empezar a estimular mis ovarios-pasa, y para Nochevieja, estar rellenita. Si no existiera esta técnica, estaría perdida. No obstante, él tiene miedo.
Empieza a verle las orejas al lobo, y dado que ya puso todas sus esperanzas con el Omifín, y este no dio resultado, tiene pánico de que le vuelva a ocurrir. Va con pies de plomo, no se quiere ilusionar.
Yo que estoy deseando empezar a pincharme y lo tengo a él acojonado diciéndome que me tranquilice. Esto es de locos. Espero que no penséis que estoy fatal, porque de hecho creo que mejoro un poquito cada día. Solamente me gustaría dejar plasmado que las mujeres infértiles tenemos que lidiar con la infertilidad y con la culpabilidad por serlo.
¿Alguna de vosotras se siente culpable por ser infértil, o se ha sentido así alguna vez?
