Tras nueve meses de espera ha llegado el emocionante momento de conocer a tu bebé. Las contracciones empezaron y decides acudir al hospital, ¿demasiado pronto? al parecer te apresuraste un poco, ¡aún no ha llegado el día!
Cada caso es diferente al otro, pero dejando de lado los embarazos riesgosos o el largo recorrido desde tu casa hasta el hospital; lo más seguro para tomar la decisión de acudir al médico es observar si tus contracciones duran al menos un minuto con un intervalo de 5 minutos entre ellas. Cuéntalas desde el inicio de la primera hasta el término de la siguiente.
Te recomendamos tener un reloj a la mano para ver la frecuencia de las contracciones. Al inicio empiezan cada 20, 10 y luego cada 5 minutos. Si se detienen pero luego se prolongan durante más de 2 horas; ya estás lista para dar a luz.
No te asustes si son más intensas y dolorosas a medida que pasa el tiempo, respira profundamente y recuerda tener lista tu bolsa del parto con todo lo necesario para el tiempo que estarás internada, pueden ser hasta tres días en caso de un cesárea.
