Si el vínculo con tus suegros era distante o simplemente cordial antes de anunciarles que estás en la dulce espera, es posible que ahora se fortalezca con el nacimiento de tu bebé.

Aunque  muchas  de ustedes tienen una relación fenomenal con sus suegros, siempre hay excepciones que hacen aún más complicadas las relaciones familiares.

El principal motivo de conflictos se halla en la forma de crianza que elegimos para nuestros hijos. Algunas mujeres, además de tolerar los comentarios de sus padres,  deben aprender a convivir con las críticas no tan agradables de sus suegros; especialmente cuando se trata de personas muy consentidoras o, por el contrario, demasiado exigentes en su manera de educar.

Te aconsejamos ser muy cauta cuando hables con ellos sobre este tema. Cuando cuiden del bebé deben seguir tus indicaciones aunque no las compartan, sé clara desde el principio para evitar los malos entendidos. La idea es acercarlos a tu pequeño, sin que eso signifique quitarte autoridad sobre él.

Guarda la serenidad si de pronto te sientes abrumada con las interrupciones de tus suegros. Lleguen a un acuerdo saludable para que tanto tú como tu pareja y otros familiares cercanos puedan disfrutar del bebé durante sus primeros meses de vida.