Nadie duda de los beneficios de la leche materna en la alimentación del bebé; pero qué sucede cuando no se tiene la suficiente cantidad o debido a problemas de salud de la madre le es complicado amamantar a su pequeño.
La idea de ver a nuestro bebé mamar del pecho de otra madre debe ser una sensación extraña que puede herir la suceptibilidad de algunas mujeres, quienes no conciben incluir en un momento tan íntimo a una tercera persona, muy a parte de ese instinto de protección, otras mamis piensan, si esa mujer es saludable y está en condiciones de apoyarlas en la lactancia.
Otras por el contrario, y quizás seas una de ellas, aceptan sin molestias que su bebé mantenga contacto con una amiga o familiar cercano en condiciones de poder amamantarlo. Y muchas más siguen las indicaciones de su médico y ven en la leche de fórmula una mejor alternativa a la posibilidad de buscar una nodriza.
¿Y si fueras tu quién hiciera lo mismo por otra mamá? es posible que en del otro lado de la historia, te animaras a servir de manera solidaria a alguien que lo necesitara. ¿Lo harías?