Cada 19 de octubre se celebra en todo el mundo el Día Internacional del Cáncer de Mama y desde elembarazo.net hemos querido rendir nuestro particular homenaje a todas aquellas personas que luchan a diario contra esta enfermedad, así como a todas sus parejas y familiares que se convierten, junto a los profesionales médicos y no sanitarios, en un apoyo emocional imprescindible para la superación.
En esta ocasión, hemos tenido el placer de hablar con Cristina Flor, psicooncóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), quien nos explica los pasos que siguen los profesionales de la psicología para ayudar a una mujer embarazada que acaba de ser diagnosticada de cáncer de mama y nos desvela las técnicas y métodos que se ponen en marcha desde dicha asociación para acompañar emocionalmente a cada paciente. #SúmateAlRosa y lee con atención
Cuando una mujer es diagnosticada de cáncer de mama durante el embarazo, es remitida a la unidad de psicooncológica a la confirmación del diagnóstico por los cirujanos o ginecólogos que la han atendido. Las reacciones emocionales que la mujer diagnosticada presenta no varían respecto a las que experimenta cualquier otra persona diagnosticada de una enfermedad de este tipo. Es decir, lo que llamamos el impacto al diagnóstico de cáncer se presenta con el mismo repertorio de emociones, en ese momento, adaptativas, que en otras personas recien diagnósticadas.
La tristeza, el miedo, la angustia, ansiedad, materializadas en un cortejo de pensamientos, sensaciones físicas, emocionales, dificultades para concentrarse, para dormir, aluvión de pensamientos anticipatorios de carácter negativo, preocupaciones variadas, llanto y miedo.
Estas emociones, pensamientos y sensaciones físicas, que son reflejo del miedo y de la ansiedad que un diagnóstico de cáncer provoca siempre, son adaptativas, en esos momentos, en la mayoría de los casos, porque permiten tomar conciencia de realidad y responder ante esa realidad de la manera mas adaptativa. Es decir, van a hacer que nos lo podamos creer, que en un principio la tendencia de cualquiera de nosotros sería, a no poder, ni querer creerlo, y van a provocar que lo podamos vivir, al creerlo, de la mejor manera posible, buscando nuestro mayor bienestar, aceptando las circunstancias que nos ha tocado vivir.
En el caso de un diagnóstico de cáncer de mama durante el embarazo, lo que marca la diferencia, es que se añaden preocupaciones por el hijo no nacido, en relación a cómo le afectarán los tratamientos, y los procedimientos médicos a su desarrollo. Asimismo, es común también, que la mujer embarazada, y futura madre, ya se sienta responsable y quizá culpable de que lo que ella siente y de que su estado emocional pueda afectar a su bebé.
Explorar en consulta en pensamientos y miedos, normales en esos momentos, facilitar que los elaboren en un contexto en el que no son juzgados ni retenidos, ayudar a normalizarlos y a expresarlos genera disminución de la angustia que producen, desbloquea cognitivamente y permite que poco a poco la mujer pueda ir adquiriendo la información que su equipo médico le irá facilitando y que habitualmente viene a tranquilizarla, ya que contará con la ayuda de un equipo multidisciplinar que la acompañará durante todo el proceso.
Los procedimientos técnicos que empleamos y la pautas que ofrecemos como psicooncólogos de AECC para controlar el estrés y los miedos son las habituales: Técnicas cognitivo-conductuales, diferentes modalidades de técnicas de gestión del pensamiento e higiene mental que permiten gestionar mejor los estados emocionales y el distress o sufrimiento emocional, técnicas de meditación o atención plena, pautas de comunicación, pautas de higiene de sueño, pautas conductuales respecto a actividades que produzcan satisfacción o gratificación personal. Siempre, adaptándolas al interlocutor que tenemos delante y a sus circunstancias en el momento de la consulta.
Sobre todo, la mujer que tras un proceso oncológico, pueda y deseé quedarse embarazada, debe saber que contará con el apoyo de un excelente equipo médico multidisciplinar y seguirá durante todo el embarazo, una vigilancia médica estrecha y humana que velará por su bienestar y el de su bebé en todo momento.
Si la mujer lo precisa, que una vez pasados los primeros meses, no siempre es así, los psicooncólogos mantenemos nuestra presencia para facilitarle la adaptación también a la vida posterior a la experiencia de la enfermedad, tras la que se suceden tantos cambios, en el cuerpo, en la mente, en la familia de la mujer o persona con que tenido cáncer que es a veces en esos momentos y no antes, cuando un paciente llega a nuestras consultas.
Habitualmente las más frecuentes en la mujer embarazada son cómo afectaran estos tratamientos a la salud y bienestar de su futuro hijo, y temen que pueda dañarle en el momento, o el futuro. El equipo de profesionales de estas dos disciplinas sabrá que explicarle y darle todas las garantías del tratamiento que finalmente se le proponga a cada mujer en su caso particular y muy concreto.
La mujer embarazada experimentará como he descrito antes miedo y angustia, malestar emocional, pero también es cierto que puede experimentar fortaleza emocional, y sentirse capacitada y competente de vivir esa experiencia por su hijo, y como cualquier madre comenzar a sobreponerse al propio malestar para centrarse en su bebé, en este caso, el hecho de estar embarazada, mucha veces hace que la mujer saque una resistencia psicológica "especial" que para ella sola quizá no mostraría.
Esa noticia produce temor y ansiedad a las mujeres que o no tienen hijos o desean tener más hijos, en general afecta emocionalmente a todas las que están en edad fértil. En algunos casos será un escollo salvable y la mujer tras unos años y siguiendo desde el principio las indicaciones de su equipo médico, podrá gestar. Con esas mujeres facilitamos la acomodación a los pensamientos y temores previos y las técnicas ya aprendidas le ayudan a vivirlo con menos malestar e incluso, con ilusión y fortaleza.
Un grupo de mujeres, bien por su edad o por otras condiciones físicos no podrá gestar, y la actuación del psicooncólogo en estos casos es acompañarla en ese proceso de duelo, ya que supone un pérdida, y facilitarle la aceptación y la expresión emocional de sus sentimientos.
La lactancia materna es posible bajo muchas condiciones y supuestos que nos parecen un impedimento y no lo son. Cualquier mujer que vaya a lactar con una sola mama cuenta con el apoyo de asociaciones como Amamanta, La liga de la leche, etc. que dispone de asesoras de lactancia certificadas con amplia experiencia y conocimientos, ( en su mayoría, aunque no siempre, son matronas o personal sanitario) y le darán el soporte técnico y humano que sea necesario. En este caso, una labor conjunta de profesionales de varias disciplinas sería la mejor intervención posible.
Desde la AECC siempre acudimos a dar respuesta de alguna manera a la solicitud de cualquier necesidad que afecta al paciente oncológico y a su familia. Los psicooncólogos de AECC hemos colaborado y colaboramos con asociaciones como Amamanta y hemos ofrecido charlas para pacientes, familiares y profesionales interesados o preocupados por este tipo de situaciones.
La AECC realiza atención psicológica grupal en todas sus sedes provinciales con diferentes temáticas tanto para los pacientes como para los familiares. Lo recomendable que se dirijan a la AECC en su provincia y soliciten la cartera de servicios, o llamen por teléfono a INFOCANCER 900100036, servicio de atención telefónica 24 horas y 365 días al año, y serán informados de todos los recursos disponibles, algunos de ellos factibles telefónicamente.
Cada 19 de octubre se celebra en todo el mundo el Día Internacional del Cáncer de Mama y desde elembarazo.net hemos querido rendir nuestro particular homenaje a todas aquellas personas que luchan a diario contra esta enfermedad, así como a todas sus parejas y familiares que se convierten, junto a los profesionales médicos y no sanitarios, en un apoyo emocional imprescindible para la superación.
En esta ocasión, hemos tenido el placer de hablar con Cristina Flor, psicooncóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), quien nos explica los pasos que siguen los profesionales de la psicología para ayudar a una mujer embarazada que acaba de ser diagnosticada de cáncer de mama y nos desvela las técnicas y métodos que se ponen en marcha desde dicha asociación para acompañar emocionalmente a cada paciente. #SúmateAlRosa y lee con atención
Cuando una mujer es diagnosticada de cáncer de mama durante el embarazo, es remitida a la unidad de psicooncológica a la confirmación del diagnóstico por los cirujanos o ginecólogos que la han atendido. Las reacciones emocionales que la mujer diagnosticada presenta no varían respecto a las que experimenta cualquier otra persona diagnosticada de una enfermedad de este tipo. Es decir, lo que llamamos el impacto al diagnóstico de cáncer se presenta con el mismo repertorio de emociones, en ese momento, adaptativas, que en otras personas recien diagnósticadas.
La tristeza, el miedo, la angustia, ansiedad, materializadas en un cortejo de pensamientos, sensaciones físicas, emocionales, dificultades para concentrarse, para dormir, aluvión de pensamientos anticipatorios de carácter negativo, preocupaciones variadas, llanto y miedo.
Estas emociones, pensamientos y sensaciones físicas, que son reflejo del miedo y de la ansiedad que un diagnóstico de cáncer provoca siempre, son adaptativas, en esos momentos, en la mayoría de los casos, porque permiten tomar conciencia de realidad y responder ante esa realidad de la manera mas adaptativa. Es decir, van a hacer que nos lo podamos creer, que en un principio la tendencia de cualquiera de nosotros sería, a no poder, ni querer creerlo, y van a provocar que lo podamos vivir, al creerlo, de la mejor manera posible, buscando nuestro mayor bienestar, aceptando las circunstancias que nos ha tocado vivir.
En el caso de un diagnóstico de cáncer de mama durante el embarazo, lo que marca la diferencia, es que se añaden preocupaciones por el hijo no nacido, en relación a cómo le afectarán los tratamientos, y los procedimientos médicos a su desarrollo. Asimismo, es común también, que la mujer embarazada, y futura madre, ya se sienta responsable y quizá culpable de que lo que ella siente y de que su estado emocional pueda afectar a su bebé.
Explorar en consulta en pensamientos y miedos, normales en esos momentos, facilitar que los elaboren en un contexto en el que no son juzgados ni retenidos, ayudar a normalizarlos y a expresarlos genera disminución de la angustia que producen, desbloquea cognitivamente y permite que poco a poco la mujer pueda ir adquiriendo la información que su equipo médico le irá facilitando y que habitualmente viene a tranquilizarla, ya que contará con la ayuda de un equipo multidisciplinar que la acompañará durante todo el proceso.
Los procedimientos técnicos que empleamos y la pautas que ofrecemos como psicooncólogos de AECC para controlar el estrés y los miedos son las habituales: Técnicas cognitivo-conductuales, diferentes modalidades de técnicas de gestión del pensamiento e higiene mental que permiten gestionar mejor los estados emocionales y el distress o sufrimiento emocional, técnicas de meditación o atención plena, pautas de comunicación, pautas de higiene de sueño, pautas conductuales respecto a actividades que produzcan satisfacción o gratificación personal. Siempre, adaptándolas al interlocutor que tenemos delante y a sus circunstancias en el momento de la consulta.
Sobre todo, la mujer que tras un proceso oncológico, pueda y deseé quedarse embarazada, debe saber que contará con el apoyo de un excelente equipo médico multidisciplinar y seguirá durante todo el embarazo, una vigilancia médica estrecha y humana que velará por su bienestar y el de su bebé en todo momento.
Si la mujer lo precisa, que una vez pasados los primeros meses, no siempre es así, los psicooncólogos mantenemos nuestra presencia para facilitarle la adaptación también a la vida posterior a la experiencia de la enfermedad, tras la que se suceden tantos cambios, en el cuerpo, en la mente, en la familia de la mujer o persona con que tenido cáncer que es a veces en esos momentos y no antes, cuando un paciente llega a nuestras consultas.
Habitualmente las más frecuentes en la mujer embarazada son cómo afectaran estos tratamientos a la salud y bienestar de su futuro hijo, y temen que pueda dañarle en el momento, o el futuro. El equipo de profesionales de estas dos disciplinas sabrá que explicarle y darle todas las garantías del tratamiento que finalmente se le proponga a cada mujer en su caso particular y muy concreto.
La mujer embarazada experimentará como he descrito antes miedo y angustia, malestar emocional, pero también es cierto que puede experimentar fortaleza emocional, y sentirse capacitada y competente de vivir esa experiencia por su hijo, y como cualquier madre comenzar a sobreponerse al propio malestar para centrarse en su bebé, en este caso, el hecho de estar embarazada, mucha veces hace que la mujer saque una resistencia psicológica "especial" que para ella sola quizá no mostraría.
Esa noticia produce temor y ansiedad a las mujeres que o no tienen hijos o desean tener más hijos, en general afecta emocionalmente a todas las que están en edad fértil. En algunos casos será un escollo salvable y la mujer tras unos años y siguiendo desde el principio las indicaciones de su equipo médico, podrá gestar. Con esas mujeres facilitamos la acomodación a los pensamientos y temores previos y las técnicas ya aprendidas le ayudan a vivirlo con menos malestar e incluso, con ilusión y fortaleza.
Un grupo de mujeres, bien por su edad o por otras condiciones físicos no podrá gestar, y la actuación del psicooncólogo en estos casos es acompañarla en ese proceso de duelo, ya que supone un pérdida, y facilitarle la aceptación y la expresión emocional de sus sentimientos.
La lactancia materna es posible bajo muchas condiciones y supuestos que nos parecen un impedimento y no lo son. Cualquier mujer que vaya a lactar con una sola mama cuenta con el apoyo de asociaciones como Amamanta, La liga de la leche, etc. que dispone de asesoras de lactancia certificadas con amplia experiencia y conocimientos, ( en su mayoría, aunque no siempre, son matronas o personal sanitario) y le darán el soporte técnico y humano que sea necesario. En este caso, una labor conjunta de profesionales de varias disciplinas sería la mejor intervención posible.
Desde la AECC siempre acudimos a dar respuesta de alguna manera a la solicitud de cualquier necesidad que afecta al paciente oncológico y a su familia. Los psicooncólogos de AECC hemos colaborado y colaboramos con asociaciones como Amamanta y hemos ofrecido charlas para pacientes, familiares y profesionales interesados o preocupados por este tipo de situaciones.
La AECC realiza atención psicológica grupal en todas sus sedes provinciales con diferentes temáticas tanto para los pacientes como para los familiares. Lo recomendable que se dirijan a la AECC en su provincia y soliciten la cartera de servicios, o llamen por teléfono a INFOCANCER 900100036, servicio de atención telefónica 24 horas y 365 días al año, y serán informados de todos los recursos disponibles, algunos de ellos factibles telefónicamente.
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