La decisión de dar o no chupete a los bebés es un tema que ha generado siempre todo tipo de opiniones entre mamás, papás y expertos. Si bien hay quien rechaza esta idea porque algunos bebés rechazan la lactancia al usarlo, diversos estudios han demostrado que, retirándolo a tiempo, el chupete puede ser una herramienta muy útil, tanto para los más peques como sus padres.
Por ello, y para aclarar todas tus dudas, hemos hablado con el doctor Juan Carlos Pérez Varela, presidente de la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial, quien nos explica cuáles son los usos y beneficios reales del chupete para los bebés desde su nacimiento y nos ofrece una serie de consejos para minimizar los posibles efectos del uso de este accesorio en el desarrollo de la boca, los dientes y las encías del bebé.
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1. Casi todas las mamás y papás primerizos se preguntan si le dan el chupete al bebé o no. Pero, ¿para qué sirve el chupete realmente?
Es un instrumento útil para los padres y el niño, pues calma la ansiedad y el dolor del bebé, le reconforta y ayudarle a dormir. Además, contribuye a reducir la incidencia de la muerte súbita y también ayuda evitar que se chupe el dedo. Pero hay que utilizarlo bien. Numerosos estudios confirman que es un instrumento muy útil, tanto para los niños como para sus padres, y que no produce malformaciones dentales si se abandona antes de los tres años.
2. ¿Es 100% necesario?
No, es una elección de los padres. El chupete, como casi todo, es un instrumento que tiene ventajas y desventajas, pero las distintas sociedades médicas coincidimos en que, en general, son mayores las ventajas que las desventajas si se retira antes de los 18 meses (y como mucho 2 años) para que los efectos adversos sobre la dentición sean reversibles. Pero nosotros creemos que siempre es mejor que succione el chupete que el dedo, pues es más sencillo retirarles el chupete a tiempo que quitarles el hábito de succionarse el dedo o dormirse mientras toman el biberón durante la llamada fase oral, porque se producen menos deformidades, sobre todo si éste es anatómico.
3. Desde su punto de vista, ¿cuáles serían los beneficios y los riesgos que conlleva el uso del chupete en recién nacidos?
Además de relajar al niño, el chupete les ayuda a ejercitar el efecto de succión, ya que, a veces, cuando son muy pequeñitos o prematuros, no tienen mucha fuerza para succionar y una forma de ayudarles es "haciendo gimnasia" con el chupete. También existen estudios que evidencian que ayuda a reducir la incidencia de la muerte súbita. Por ello, para los bebés que no toman pecho, que solo toman biberón, la recomendación del chupete cobra mayor importancia ya que previene el riesgo del Síndrome de Muerte Súbita del Lactante. Aunque no se sabe con exactitud el mecanismo por el que el chupete ayuda a evitar la MSL, todo apunta a que está relacionado en que el chupete aumenta los microdespertares, favorece que la lengua se mantenga en posición anterior, aumenta levemente los niveles de dióxido de carbono y el tomo muscular de la vía aérea. También favorece el incremento la producción de inmunoglobina A (IgA), por la succión no nutritiva. Además, su presencia en la boca impide la obstrucción total de la misma y nariz sobre el colchón (un taponamiento que podría provocar la muerte súbita).
Los inconvenientes son que el uso del chupete tiene efectos sobre la dentición del niño, ya que que al succionarse de forma no nutritiva (no para ingerir alimento) los dientes centrales inferiores se desvían paulatinamente hacia dentro, mientras que los que se encuentran en el mismo plano (pero en el maxilar superior) tienden a separarse y a sobresalir hacia fuera generando el efecto conocido como dientes de conejo.
4. Si el bebé utiliza chupete durante sus primeros años de vida, ¿de qué forma puede influir en el desarrollo de sus dientes y encías? ¿Necesitará llevar ortodoncia cuando crezca?
Desde la Sociedad Española de Ortodoncia recomendamos que se emplee solo hasta los 12 meses del bebé, nunca más tarde de los 18-24 meses. Si se retira antes de los 2 años los efectos negativos sobre su desarrollo oral son reversibles. Respecto a si necesitará llevar ortodoncia al crecer, no podemos decir que exista una relación causa-efecto, pero sí existen evidencias de los efectos sobre la dentición mencionados anteriormente. Efectos que, si el chupete se retira antes de los 18 meses, son reversibles. Por tanto, si el chupete se retira a tiempo no influirá sobre la necesidad de una ortodoncia.
5. ¿Cómo es el chupete ideal? ¿Qué características debe cumplir para que no afecte a la boca del bebé?
Sobre todo, lo más importante, es que el tamaño del chupete se ajuste al de la boca del bebé, porque si no es adecuado potenciará que se puedan generar deformaciones.
6. ¿Cuáles son las alteraciones más frecuentes que puede provocar el uso del chupete?
El uso del chupete provoca que los dientes centrales inferiores del bebé se vayan desviando paulatinamente hacia dentro, mientras que los que se encuentran en el mismo plano pero en el maxilar superior, tienden a separarse y a sobresalir hacia fuera, lo que se conoce popularmente como "dientes de conejo”. Su uso prolongado más allá de los 24 meses, puede provocar que los caninos choquen entre sí y ambas filas de dientes no se cierren correctamente causando una maloclusión conocida como mordida abierta, es decir que los dientes superiores se van hacia adelante, y los inferiores hacia atrás. Por otro lado, la acción de succionar pone en funcionamiento una serie de músculos de la cara que, junto con la posición de la lengua, hacen que finalmente las líneas superiores e inferiores pierdan su paralelismo causando mordida cruzada, debido a que el chupete está considerado una causa secundaria que provoca que el hueso no crezca a lo ancho correctamente, dando lugar a un "paladar estrecho ojival".
El uso permanente del chupete descoloca los dientes y puede afectar al hueso, aunque éstos vuelven a reubicarse unos meses después de interrumpir su utilización (siempre y cuando lo hagamos antes de los 2 años), ya que hasta esa edad no se suelen producir malformaciones de la articulación temporomandibular, ni deformaciones óseas significativas que modifiquen la arcada dental definitiva.
7. ¿Cuándo es recomendable retirar el chupete para evitar problemas bucodentales por un uso prolongado?
El chupete puede provocar las alteraciones bucodentales mencionadas anteriormente, pero para que las malformaciones sean evidentes se estima que es necesario una presión más o menos constante durante varias horas diarias durante muchos meses (más allá de los 24 meses de edad en la mayoría de los casos).
8. A parte del uso prolongado del chupete, ¿qué otros hábitos orales pueden deformar la boca de los peques?
La succión del dedo (o incluso la mano en algunos bebés) es mucho más perjudicial, y además es mucho más difícil quitarles ese hábito.
9. A su juicio, ¿qué pautas deben seguir mamás, papás y familiares para hacer un uso correcto del chupete?
Además de retirarlo entre los 12 y los 18 meses, es importante que no se use el chupete para retrasar una comida. Nunca debe de mojarse en miel, zumo, azúcar, ni en ningún otro líquido que no sea agua, ya que podrían aparecer las indeseadas caries dentales, que tienen gran importancia.
