Puede que te hayas hecho esta pregunta alguna vez, y los expertos pueden confirmártelo. Las últimas pruebas y estudios muestran evidencias de que las emociones de la madre durante el embarazo tienen efectos sobre el bebé. Los pensamientos positivos pueden formar el cuerpo, curar de forma interna e incluso nutrir al bebé de forma más saludable durante el embarazo. Puede parecerte una locura, pero se habla de que los pensamientos de la mujer embarazada tienen una conexión física con su bebé, éstos se comunican a través de neurohormonas.
Los diccionarios médicos definen las emociones como un estado físico y mental, refiriéndose a las hormonas y otras moléculas asociadas con la emoción. Las emociones de la mujer embarazada se crean en base a cómo percibe su embarazo, por ejemplo, cómo va a realizar el baño del bebé, la decoración de la habitación, su matrimonio, el trabajo… Estas emociones son las precursoras de las neurohormonas. Podemos ver un ejemplo más detallado:
Cuando una mujer embarazada está ansiosa, estresada o en estado de miedo, las hormonas de estrés que se transmiten al torrente sanguíneo pasan a través de la placenta del bebé. Cientos de estudios confirman que los químicos expulsados por el cuerpo de la mujer embarazada se transportan al útero y afectan al bebé. El estrés, o los pensamientos negativos, activan el sistema endocrino del bebé e influencian el desarrollo cerebral del feto. Los niños nacidos de madres con un embarazo con mucho estrés tienen más probabilidades de tener problemas de comportamiento una vez crezcan. Así mismo, también hay más probabilidad de partos prematuros, bajo peso, hiperactividad, irritabilidad… Por ello es necesario, que ante una situación continuada de estrés o un diagnóstico de estrés crónico, la mujer embarazada actúe rápidamente consultando a un médico.
Por el contrario, las emociones positivas han mostrado en estudios que pueden mejorar la salud del bebé, le transmiten un sentido de felicidad y calma, que se traducirá en serenidad a lo largo de su vida.
Por otro lado, cuando estás calmada y relajada, segregas químicos muy parecidos a relajantes y tranquilizantes, lo que hace que el sin estrés el sistema nervioso de tu bebé funcione perfectamente.
Existen muchos ejercicios para motivar las buenas sensaciones y generar estas respuestas por parte del bebé. Recuerda que esto son resultados de varios estudios y que en caso de notar algún problema o inconveniente durante tu embarazo siempre debes consultar a un especialista.
